YAWAR FIESTA: MISTICISMO O CRUELDAD

El martes 17 de junio del presente año el diario Perú 21 publica en su página web que el Plan nacional para la conservación del cóndor andino  tendría en su agenda la revisión del Yawar Fiesta, en este mismo artículo se menciona que esta fiesta ha dejado de ser   sagrada para convertirse en una actividad turística y por lo tanto económica que no considera la preservación de nuestra ave.

Para los que no sepan o no recuerden lo que es el Yawar Fiesta (Fiesta de la sangre) les diremos que es una festividad que se celebra generalmente en el mes de julio en Cotabambas en la región Apurímac y también en Ayacucho. Surgió durante el virreynato como una expresión del sufrimiento de los comuneros ante el maltrato de los gamonales. El comunero es representado por el cóndor (cultura andina)  y los gamonales (cultura hispana) por el  toro.

El procedimiento consiste en atrapar a un cóndor que luego es amarrado al lomo del toro con el fin de que este mantenga el equilibrio y de picotazos al toro arrancando piel y carne. Ambos lucharán por soltarse uno del otro y en ese intento mucha sangre es derramada. Qué escena más cruel, es muy doloroso para los dos animales. Se termina con la muerte del toro y la liberación del cóndor, de no ser así, tal como lo vemos en el video, se cree que les esperará un año muy duro a la comunidad.

Saliéndonos de la cosmovisión andina el acto en si es, a mi parecer, un atentado a los protagonistas de esta fiesta. Muchas veces, el cóndor sufre heridas graves y muere en medio de su propio dolor y sufrimiento lo que contribuye a la disminución de esta especie tan necesaria para mantener el equilibrio ecológico en esas regiones, equilibrio que tan perfectamente diseñó nuestro Dios  Creador y que el ser humano en un acto de inexplicable sadismo destruye.

Nos preguntamos entonces si nuestras costumbres deben ser siempre consideradas sagradas o infalibles, es que acaso no debemos siempre reflexionar sobre nuestros actos para tomar decisiones de cambiarlos o no?. Es que acaso no debemos dejar de hacer algo que perjudique a otros y a nosotros mismos? Es que no nos hemos dado cuenta de las consecuencias de estas Fiestas para nuestra preciada fauna?  Esta fiesta que es ahora más turística que otra cosa debería terminar o cambiar por nuevas costumbres donde la crueldad ya no sea la escencia. Por qué siempre tienen "éxito" aquellos actos que apelan a las pasiones o emociones fuertes en el ser humano donde la razón, que fue creada también para darnos el justo equilibrio como mayordomos  de la naturaleza, no tiene cabida?

Reflexionemos  y tomemos decisiones  que puedan ayudarnos a cuidar de esta maravillosa creación y así cumplir con lo que nuestro buen Dios nos encomendó en Génesis 2:15.